La mañana del 15 de enero la Orden de la Inmaculada Concepción se vistió de gozo, alegría y agradecimiento al Señor: el Papa Francisco firmaba el decreto de beatificación de nuestras 14 Mártires Concepcionistas Franciscanas. Serán nuestras primeras Hermanas en subir a los altares, después de Santa Beatriz de Silva, nuestra fundadora.
La Madre María del Carmen Lacaba y sus trece compañeras fueron martirizadas durante la persecución religiosa de 1936 en la Guerra Civil española. Murieron perdonando, ofreciendo sus vidas como “hostia viva” para la reconciliación del pueblo español y salvación de sus perseguidores. Dieron su vida por amor.
Las hermanas pertenecían unas, diez, a la Comunidad de San José de Madrid, ubicada primero en la actual calle de Mártires concepcionistas, mudadas luego a Las Rozas; dos pertenecían a la Comunidad de Escalona en Toledo y las otras dos a la Comunidad de El Pardo en Madrid, los cuerpos de estas últimas son los únicos que se conservan, actualmente reposan en el Monasterio de la Concepción de Toledo, Casa Madre.
Para nosotras es una gran alegría, motivo de alabanza y agradecimiento a la Trinidad, a María Inmaculada y a Santa Beatriz por el don de estás hermanas que no guardaron su vida para sí sino que la “perdieron” para recuperarla en Cristo su esposo y Señor en fidelidad a la Fe.
¡Sea por siempre bendito y alabado el santísimo nombre de Jesús!