BURLADA, NAVARRA 19-21 DE SEPTIEMBRE, 2023
VIVIR Y ACOMPAÑAR EL CRECIMIENTO AFECTIVO DE LA PERSONA DESDE LA PALABRA
“Todas somos conscientes de la necesidad de capacitar a las Hermanas Formadoras para que puedan realizar un buen acompañamiento y discernimiento, y transmitir nuestros valores carismáticos a las nuevas candidatas”
Por ello la Federación nos ha ofrecido la posibilidad de reflexionar durante todo este año sobre un tema fundamental: Cómo acompañar el crecimiento en el mundo afectivo.
Trabajo y reflexión guiados por un hermano entrañable y poseedor de un profunda experiencia y sabiduría: Mikel Hernansanz, quien paso a paso ha ido acompañando con el corazón abierto el camino de este grupo de hermanas.
Después de realizar un trabajo profundo sobre dos fichas: “el despliegue de la afectividad hacia el Tú de Dios” y “Cuando la afectividad teologal atraviesa la región del realismo y del conflicto”, en un acompasado recibir y dar, culmina nuestro ciclo con un hermoso encuentro presencial, cargado de sencillez. Vida y Palabra se entremezclan en el acompañamiento. Apertura a Dios y a la hermana desde la apertura y la acogida fecunda. Lo que más nos cuesta, compartir desde dentro, es lo que más nos enriquece porque realizamos ese proceso de apertura a la novedad de Dios y de la vida en la sencillez de las hermanas. Jesús acontece donde la humanidad está necesitada. Y nosotras sentimos que muchas veces “nos falta el vino”.
Así lo expresaba nuestra M. Presidenta en su bienvenida: El curso presencial es una oportunidad nueva de participar activamente, compartiendo vida y experiencia.
La primera clase enmarcó el objetivo de estos días: “Compartir cómo el evangelio nos va cogiendo de la mano, nos va sacando de nuestras aldeas, de nuestros mundos reducidos, y nos va abriendo los ojos y el corazón para ver mejor, para ver “hasta lejos”, para ver bien “a las hermanas”, para ver la realidad como la ve Dios.
Partimos de un recorrido, a modo de recuerdo, de las mediaciones presentes en el proceso de acompañar:
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La hermana que acompaña: Qué exigente tarea. Se nos pide que seamos honradas, que seamos nosotras mismas, que estemos en proceso, que tengamos conciencia de misión, que seamos asiduas en la oración, que respetemos el espacio sagrado de la otra y que colaboremos desde la libertad para que emerja en ella lo mejor.
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La hermana acompañada: La relación salva la vida y una relación sana que parte de un vínculo creado desde la misión.
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La liturgia: Hay que cuidar tanto la formación humana como la fe. Es muy importante enraizar la fe en situaciones humanas, en la persona en concreto. Hay que trabajar a la persona, su historia, su afectividad, su autoestima, sus carencias, sus heridas, lo que está viviendo, la situación en que se encuentra, para que la fe, la vocación, la riqueza del evangelio cuaje y eche raíces en ella.
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La Comunidad: Mediación para aprender a amar lo real, amar lo que y amar a las que toca tal como Dios nos llama a vivir la vocación aisladamente sino a vivir con estas hermanas concretas.
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La Palabra: Nuestra espiritualidad no se basa en la hondura de la persona, en la armonía, en la interioridad, en la paz del corazón, en la comunión con todo nuestro ser, sino en una historia del amor de Dios a la humanidad. Lo especifico de nuestra fe se basa en una historia a través de una concreción histórica del pueblo de Israel y una persona, Jesús. Y eso nos llega a través de la palabra y se convierte en una mediación privilegiada para la relación con el Señor y para el crecimiento total incluyendo la afectividad. La historia de pueblo de Israel es mi historia, aquello que aconteció sucede en mi de distinta manera con la misma intensidad de realidad.
Lectura afectiva desde dos niveles:
– A nivel antropológico: ¿Qué experiencia humana que yo estoy viviendo me puede ayudar a conectar con esté texto? ¿y desde esta experiencia humana qué me atrae y qué me causa resistencia? ¿Qué vivencias percibo en dichos
textos que conecta con los míos?
-A nivel espiritual: ¿Qué me dice del Señor el texto? ¿Qué me dice de mi dicho texto? ¿Qué aporta, contribuye este texto a mi relación con el Señor?
Todo bellamente entretejido en tres momentos: Trabajo personal, trabajo en pequeño grupo y puesta en común. Vida y Celebración, Encuentro y Comunión.
Un camino hacia el interior de la mano de:
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Los Milagros: Procesos de transformación afectiva.
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La Parábolas: Contextos relacionales a los que se nos invita a entrar.
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Los discursos: Luces que van alumbrando nuestra historia relacional.
