PRIMERA PIEDRA para la Iglesia DE SANTA BEATRIZ en Malabo – GUINEA ECUATORIAL -AFRICA-

PRIMERA PIEDRA para la Iglesia DE SANTA BEATRIZ en Malabo – GUINEA ECUATORIAL -AFRICA-

 

El monasterio de Concepcionistas Franciscanas de Malabo en Guinea Ecuatorial ha vivido el 21 de mayo una jornada memorable. Se ha colocado la primera piedra para la Iglesia parroquial que llevará el nombre de Santa Beatriz de Silva.

Haciendo memoria, la pequeña comunidad que fue fundada en 1986 en Akonibe, se trasladó a Malabo el año 2017. Disponían de una pequeña capilla, pero dado que el Barrio “Nuevo Porvenir” va creciendo, resulta pequeña para las celebraciones Litúrgicas que cada vez son más numerosas y participativas.

Con este deseo, el pueblo de Dios del que ha nacido la iniciativa, hace un año,  comenzó a hacer una colecta especial los domingos, a fin de recoger fondos para este proyecto, ya que actual capilla resulta pequeña para las celebraciones dominicales y festivas, tan participativas en África. También tienen en proyecto unos salones para dar catequesis, ya que hasta ahora las hermanas ceden el locutorio, pero no es suficiente.

 

 Para ello las hermanas han cedido el terreno cerca del monasterio, si bien han tenido que sacrificar un montón de plataneros, aguacates et. que les servía de sustento… pero contentas de poder contribuir a este hermoso plan.

Esta pequeña comunidad, reducida por la edad de las hermanas fundadoras que han tenido que ir regresando a España por falta de salud y alguna ya ha partido a la casa del Padre, se mantiene con tres hermanas nativas y una española, Mª Ángeles, actualmente reponiéndose de su operación de rodilla en España.  Tienen una nueva vocación y alguna más que está en discernimiento.

El 21 de mayo se puso la primera piedra con la bendición del Vicario General de la Diócesis, D. Benjamín Bosepa Barila. Y la participación de numerosos fieles, como se aprecia en las fotos.

Ojala esta iglesia, pueda estar terminada pronto para bien de los fieles y alegría de las hermanas y sea también una llamada vocacional para muchas jóvenes en este corazón de África.

Sin duda que las aportaciones de los fieles son necesarias… pero insuficientes para poder seguir adelante con este proyecto. Ojalá todos podamos colaborar con un pequeño “granito” para llenar el montón…